Los hinchas del Rojo se acercaron, una vez más, al estadio de Lanús, con ilusiones de avanzar a la próxima ronda. Noche fresca, pero linda, ideal para ir a ver un partido de fútbol. La gente alentó prácticamente todo el encuentro y copó toda la popular.

En el comienzo del encuentro, el Rey de Copas fue mejor y predispuesto a buscar el gol, para evitar inconvenientes. Las llegadas más profundas eran mediante pelotas aéreas. Por su parte, el Auriazul estaba más replegado y casi no tuvo chances para anotar.

Sin embargo, durante el transcurso del choque, el equipo de Carlos Tévez se quedó y dejó crecer al conjunto puntano. De hecho, casi convierte un gol olímpico, pero la pelota pegó en el travesaño. En el tramo final, el Rojo tuvo la más clara de la primera parte, con un gran pase de Gabriel Neves que tomó Mauricio Isla, para que lance un centro y Alexis Canelo lo erró frente al arco. Increíble.

En el complemento, Independiente volvió a comenzar mejor, pero estaba jugando con la presión de los hinchas, que se mostraron impacientes en el estadio. Sin embargo, a los 15 minutos, tiro de esquina de Adrián Spörle y cabezazo de Alexis Canelo para abrir la cuenta.

A partir del tanto, el Rojo comenzó a ser más punzante en ataque y buscó liquidar el resultado. La mejor que tuvo en este momento fue un centro de Canelo que Gabriel Ávalos remató y pasó por arriba del travesaño. Lo querían liquidar.

En el tramo final, el Rey de Copas ya estaba más relajado, pero, a su vez, quería convertir el segundo. Mauricio Isla lanzó un picante centro rasante, Ávalos lo capitalizó, pero el arquero César Taborda le ahogó, con lo justo, el grito de gol.

Pero a los 43 minutos, todo se iba a liquidar. Canelo tiró un cabezazo al área, Alex Luna la tomó y definió ante la salida de Taborda para que la gente y Tévez respiren aliviados.

A los 45 minutos, el estadio se iba a venir abajo por el debut de Tomás Parmo en primera, algo muy esperado por todo el mundo rojo. De hecho, hasta tuvo una oportunidad para anotar su gol, tras tomar un rebote que dejó el arquero, luego de contener un tiro libre de Ávalos, pero Taborda le ahogó el grito de gol.

A pesar de que no tuvo un buen primer tiempo, Independiente mejoró y se soltó más luego de llegar al gol. Al principio había muchas desprolijidades, falta de ideas y poca generación de chances, pero después del tanto de Canelo, todo cambió y fue justo merecedor del resultado.

Ahora aguarda por el ganador del cruce entre Godoy Cruz y El Porvenir. Mientras tanto, la semana que viene, debutará en la Liga Profesional. Aún espera por día y horario.